Fecha Inicio: 06/02/2021
Fecha Finalización: 26/02/2021
Año Publicación: 2018
País: Argentina
Sinopsis:
Esta es una novela sobre falsificadores y falsarios, con personajes reales que parecen de ficción. La narradora, una crítica de arte que trabajó para una tasadora por cuyas manos pasaban obras falsificadas, relata una historia singular, aunque advierte: «No esperen nombres, estadísticas, fechas. Lo sólido se me escapa, solo queda entre mis dedos una atmósfera imprecisa, técnicamente soy una impresionista de la vieja escuela. Además, todos estos años en el mundo del arte me han vuelto un ser desconfiado. Sospecho en especial de los historiadores que con sus datos precisos y notas heladas a pie de página ejercen sobre el lector una coerción siniestra. Le dicen: “Esto fue así.” A esta altura de mi vida yo aprecio las gentilezas, prefiero que me digan: “Supongamos que así sucedió.”» En el centro de la trama hay un personaje llamado la Negra, que falsifica lienzos de la pintora Mariette Lydis, retratista de la alta sociedad bonaerense. Aparecen también un lugar llamado Hotel Melancólico en el que viven varios artistas, y una película de culto sobre beatniks bonaerenses en la que asoma la Negra, figura escurridiza donde las haya...
Opinión personal de Liliana:
Una novela sobre falsificadores de arte, con personajes que parecen de ficción pero muchos de ellos son reales.
La verdad que comencé la lectura con todas las expectativas y debo decir que en un comienzo, pensé que iba a ser uno de esos libros que se los recomendas a todos, por lo bueno que esta, pero pasada la primera parte, me decepciono. Me quede con la sensación de que la autora tenía una gran idea para escribir el libro, pero no supo cómo seguir la historia. De todas formas, siempre es bueno leer nuevas historias y autores, y darle una oportunidad (incluso más, si son argentinos).
La luz negra de María Gainza, la autora nos mete de lleno en el lado turbio del mundo del arte de la mano de cuatro emblemáticas protagonistas.
ResponderEliminarEs una novela corta con un comienzo más que interesante y prometedor, pero que al final resulto siendo un tanto insulso como las galletas de arroz.
Sin embargo, puedo rescatar que tiene una narrativa muy bonita, utiliza en todo momento metáforas muy lindas. Aporta rica información de tantos artistas que dejaron impronta en la historia y que hoy tal vez con suerte alguno decora el cartel señalando el nombre en una esquina. Entremezcla ficción con datos verdaderos que invitan al lector a investigar sobre ello.
Las cuatro protagonistas están enlazadas Enriqueta, Mariette Lydis, una artista austriaca que fue amiga de Amelia Earhart, La Negra el personaje escurridizo del cual la autora se apoya para darle un nombre a esta historia, l y nuestra narradora, todas son personajes solitarios y enigmáticos,
El libro tiene un buen estilo, material original, entretenido y misterioso, deja al lector tantas posibles interpretaciones, Leer esta novela fue un tanto como observar cualquier pintura puesta en exhibición donde los diferentes colores y formas nos provocan sentimientos y emociones que nos lleva a interpretar de una manera diferente lo que nos quieren comunicar.
Fue una propuesta interesante de la cual pude disfrutar por momentos a la cual estoy a favor de darle una chance.
“Cada artista sumerge el pincel en su propia alma y pinta su propia naturaleza en sus cuadros”
Cuando tuve el libro entre mis manos por primera vez, no veía las horas de empezar a develar lo que escondían sus páginas. Al leer la reseña, el contenido parecía prometedor. Pensaba que había una aventura, alguna situación escabrosa, algún hecho que hiciera brillar las cualidades e ingenio de los falsificadores. Sin embargo, quede esperando todo eso. Si bien la historia no es “descartable” ya que de ella se pueden obtener muchos datos interesantes, no la encontré entretenida.
ResponderEliminarNo obstante, de la mano de Gainza, mi curiosidad me llevó a recorrer galerías de arte imaginarias y observar las obras de Mariette Lydis, Pedro Figari, Lino Enea Spilimbergo, Leonidas Gambartes, Héctor Basaldúa, Benito Quinquela Martin y tantos otros pintores renombrados de quienes conocía su nombre, pero muy poco de su arte. Eso me encantó.
Creo que la historia me hubiera gustado más si por lo menos se hubiese encontrado a la famosa Negra de la historia. Me quedé pensando ¿habrá existido? ¿fue leyenda? ¿No será que la muy talentosa Enriqueta falsificó a una persona, metiéndose tanto en su personaje que hasta lo transformó en real? Lamentablemente, no hay en el mundo una luz negra, que, apuntando fijamente a una persona, nos permita descifrar cuales son los últimos cambios o retoques que se hicieron en ella para descifrar si es en realidad auténtica o una burda falsificación.
Como dice la autora, el falsificador tiene «El talento un poco siniestro de entrar en el alma de los demás.» Y eso señores, es todo un arte.