Fecha de inicio: 29 de Abril de 2016
Fecha finalización: 01 de Junio de 2016
Autor: Florencia Canale
Pais: Argentina
Año: 2011
Genero: Novela Histórica
Sinopsis:
Remedios volvió a apoyar su cara en el pecho de su tío. La angustia dominaba su cuerpo. Le costaba respirar. Sabía que todo estaba terminado, que jamás volvería a ver a José. No sólo por su enfermedad que la distanciaría a leguas de él, sino también por la traición en la que lo había hundido. Había actuado mal, se había equivocado mucho. Necesitaba que su marido la perdonara, pero eso parecía imposible. Todos saben que la vida del general José de San Martín no estuvo signada por circunstancias fáciles: la coyuntura política y social de una Argentina en sus albores le dificultó el camino hacia la gloria. Sin embargo, pocos conocen que el hombre más poderoso del continente americano dio una de sus batallas más feroces puertas adentro, en su vida doméstica. ¿Su peor enemigo? Remedios de Escalada, su mujer, la madre de su hija. Florencia Canale, sobrina en sexta generación de Remedios y heredera de un verdadero tesoro de anécdotas y documentos familiares, siguió de cerca las huellas de esa contienda privada. Rastros que ponen al descubierto la cotidianidad de una mujer que no quiso ni pudo someterse al mandato masculino de su época, y que en ese devenir fue capaz de engañar y ser infiel a su marido con hombres de su mayor confianza. Pasión y traición es una novela narrada con ritmo palpitante, que apela a la ficción sin descuidar un sólido rigor histórico. Una historia de amor y de furia, de gritos y soledades, que habla de una mujer y su tiempo, de un hombre y sus peores fantasmas.
comentario de Natalia
Me encontré con un libro narrado muy simple y con falta de emoción y profundidad. A juzgar por el titulo creo que le faltó más pasión en la redacción de la historia, me esperaba otra cosa. Más allá de eso, me dio mucha tristeza la vida que tuvo Remedios desde que se caso con San Martin, tuvo que dejar todos sus sueños de lado y dejar esta vida con una corta edad. Con respecto a sus infidelidades, es casi entendible que una joven de 17 años cuyo marido mucho mayor que ella y quien no demostraba ningún tipo de interés hacia su persona, termine buscando en otro lado lo que no encuentra en su casa, obviamente que en la época en que esto ocurre es muy mal visto y genera remordimientos en Remeditos, pero si esto aconteciera hoy en día, seriamos muchos los que la justificaríamos. Descubrí un San Martin avasallante e interesante con un gran amor por la Patria, pero nada recomendable tenerlo de esposo.
ResponderEliminarEn conclusión el libro no es malo, se conoce un lado de la historia que no nos cuentan en la escuela, pero me parece que el título dice más que lo que cuenta la historia en el libro. Me quede con ganas de más...
No conocía la vida familiar del general San Martín, si la que todos conocemos como “Héroe Nacional”, quien deja su vida al servicio de la Patria e intenta lograr su objetivo: “Independizar Argentina, Chile y Perú del dominio español”
ResponderEliminarSin pensar demasiado digo “qué mal bicho”, para qué condena a una niña de la que se enamora (porque así lo describe la autora: un hombre atrapado por la belleza de Remedios) a una vida miserable, sabiendo que ella pertenecía a una clase rica, con comodidades y lujo. Así el la conoce, no dice nada y la utiliza para beneficio político.
Las acciones que ella comete, no bien vistas por la sociedad, las justifico por el desamor vivido con su marido.
Me surge una dicotomía: por un lado valoro del general su forma austera de vida, hombre de palabra, comprometido con su labor, cumple hasta con el detalle de ser puntual a una cita pactada. Comparado con los políticos que conocemos, acostumbrados a la opulencia, al despilfarro, digo ¿cómo no copian las virtudes de José?
Por otro lado, ahondando su vida familiar, critico su comportamiento, donde existe abandono y olvido para con su esposa, al punto de no recordarla por estar tan inmerso en sus objetivos políticos.
Me gustó leer Pasión y Traición, pero me dejó una gran pena, el sufrimiento vivido por María de los Remedios Escalada, víctima de un ser tan cruel, hasta último momento, sigue pensando en su querido soldado. Siendo muy joven no pudo disfrutar ni de su marido ni de su pequeña Merceditas.
Cuando iba a la escuela, me contaron la historia de un valiente general llamado Libertador de América. Un gran hombre que puso en riesgo su vida y su salud no solo por su patria sino también por la de nuestros países hermanos. Todavía puedo rememorar al ejército de los andes, al héroe enfermo transportado en una camilla atravesando la helada y agreste cordillera. También lo puedo ver debajo de su caballo en la batalla de San Lorenzo cuando Cabral se inmoló por él y el encuentro con Manuel Belgrano en la Posta de Yatasto. En algunos libros de la primaria veía a las damas mendocinas bordando la bandera… muchas, muchas imágenes se cruzan por mi mente cuando evocan su nombre.
ResponderEliminarCon el relato de Florencia Canale, los dibujos de mi infancia, se levantaron de las empolvadas páginas, tomando forma humana, dejaron de ser héroes de papel y se transformaron en personas con agallas para darlo todo por un ideal. No se si será que dejé de verlos con ojos de niña de escuela pero me trasladé un poco a la época y pude comprender un poco mas de la historia. Pude sentir el dolor en los huesos del general, el frío y el cansancio de los soldados que se preparaban para enfrentar duras luchas con los pocos recursos existentes, pude sentir en el aire el olor de la revolución, las luchas entre los realistas y los patriotas.
Cuando terminé de recorrer sus páginas me quedó una sensación de tristeza por la vida que le tocó a Remedios. La niña mimada, que soñaba con el amor, la que enfrentó a la sociedad rompiendo su compromiso para casarse con el soldado que con una mirada conquistó su corazón; la que se despojó, por amor, de su vida llena de lujos; la que dejó la casa de sus padres donde vivía entre algodones para mudarse a una sencilla casa en Mendoza y cumplir con su responsabilidad de esposa. Al casarse siempre tuvo que competir por el amor de su marido quien siempre tuvo de amante a esta Patria sin destino marcado. ¿Cómo no va a caer en los brazos de otros hombres ante tanto desamparo? ¿Quién puede juzgar su conducta ante tanta soledad? ¿Cómo, el heroico prócer, pudo enviar a su esposa enferma y a su pequeña hija a Buenos Aires con la peligrosa situación que se vivía en ese momento y en esas precarias condiciones? ¡Qué triste vida conyugal la de Remedios!. Dicen que murió en una estancia de Buenos Aires pero para mi falleció el día que San Martín descubrió la verdad y ella volvió a su casa llevando consigo un ataúd.
Nunca voy a dejar de admirar al General Don José de San Martín por su coraje, su empeño, la audacia de sus estrategias militares, pero lamentablemente, a mi modo de ver, le faltó corazón para ser el héroe de su propia vida y la de su pequeña familia.
Personalmente este es uno de los comentarios más difícil que debo realizar, Florencia Canale de una manera impecable pero simple sin muchos adornos nos narra esta historia donde realiza una construcción histórica de ciertos acontecimientos verosímiles, nos sumerge en la vida de una de aquella mujeres emblemáticas que engalanan nuestros libros de escuela, paréntesis aparte debo confesar que me encantan las novelas históricas y más donde nos cuentan hechos de personajes tan cercanos. A mi parecer tal vez le falto más pasión tal como sugiere el título y más datos de fechas ya que en muchos momentos debí volver sobre lo leído para ver en qué año transcurrían algunos acontecimientos importantes.
ResponderEliminarLeer la historia de Remedios hizo preguntarme que tanto hay de verdad y que tanto de ficción, al hurgar públicamente en la intimidad de alguien me convierte en una panelista de un programa farandulero que nos coloca en posición de jueces donde es fácil levantar el dedo acusador.
Lo que hoy nos resulta aberrante era común en esa época, que las niñas fuesen usadas por sus padres por conveniencia e interés para mantener un estatus social o una estabilidad económica, entregadas a temprana edad a hombres maduros, matrimonios arreglados donde el amor era el último ingrediente que se adicionaba y Remedios no era la excepción. Esta frágil niña con un comportamiento inusual para su época y con la aprobación de un padre permisivo decide romper su destino, no sé si para bien o para mal pero al menos tuvo la oportunidad de trazar su camino y comienza a navegar en esta relación tan ambigua debatiéndose entre el amor y el odio con este hombre venerado como líder, ejemplo, y orgullo, ese prócer que dio todo por la patria, pero no pudo ni supo manejar la batalla que le planteo su propio corazón.
San Martín que según manifiestan los testigos dueño de una mirada penetrante y sus aires de extranjero logra cautivarla, ella dispuesta a entregarlo todo por amor sufre el primer desencanto en la mismísima noche de bodas donde él como un déspota decide romper todas sus vestiduras, es ahí donde aprende a ser sumisa a bajar la mirada y a aceptar que las cosas son así solo por ser mujer, porque eso era un requisito excluyente en el contrato de toda buena esposa.
El abandono, la soledad y el despecho tal vez fueron los causantes de sus travesuras, a mi parecer no es otra cosa que una manera errónea de obtener afuera lo que no consiguió dentro, la profunda necesidad de sentirse amada y el deseo ardiente de su carne joven la hicieron presa de aquellos amores furtivos. Él fue implacable y despiadado echándola por completo de su vida, dejándola a merced de su suerte, aplicándole el peor de los castigos, la indiferencia que es más cruel que el mismo odio.
La autora logra conmoverme cuando relata la muerte de Antonio, su padre, Remedios ya consumida de cuerpo y alma solo aguarda el momento de su partida, la imagino en su lecho de muerte pálida y flacucha aguardando hasta el último instante que llegara su anhelado esposo con la redención tan soñada, ella muere de tristeza entre lágrimas y suspiros porque esto último nunca sucedería.